Comida local

Siempre que viajo a países lejanos prefiero disfrutar de la comida local. Eso de «comida internacional» no es de mi gusto cuando estoy recorriendo exóticas geografías. No soy escrupuloso y no suelo hacerle ascos a casi nada, y eso de «todo lo que anda, nada o vuela a la cazuela» siempre encuentra en mí, un estómago agradecido.

Algunas veces las propuestas no suenan muy sugerentes, al menos eso me sucedió un día en Jamaica. Me indicaron, y no tuve ninguna posibilidad de escapatoria, que almorzaríamos en un restaurante italiano. Confieso que me gusta la comida italiana, no era ese el problema, pero no había llegado hasta la isla de Bob Marley para saborear las exquisiteces italianas.

Sin mucho entusiasmo por mi parte partimos hacia Ocho Ríos. El restaurante se llamaba Evita y estaba situado en una colina. Confieso que la sorpresa fue mayúscula; el restaurante era una antigua y preciosa casa colonial y sus sobados y brillantes suelos eran de madera de caoba, todo el mobiliario rezumaba mucha historia. Las vistas desde el interior eran espectaculares.

Nada más acomodarnos fuimos atendidos por su dueña, la elegante y simpática Eva Myers. Esta veneciana de nacimiento, abrió el restaurante en 1.984 y ha conseguido que en el trascurso de los años, personajes ilustres como Kate Moss, Naomi Campbell, Keith Richards, Denis Hopper, Shakira, Brad Pitt, la princesa Margarita o Kofi Annan entre otros, saborearan los platos «de la mejor casa de pastas de Jamaica».

Eva es una excelente anfitriona. Le gusta hablar con sus clientes y también sugerir de viva voz alguna de sus sabrosuras culinarias. Yo me entregué y sin duda acerté. Según iban llegando los diferentes platos, los picaros ojos de Eva me observaban a la distancia buscando mi aprobación. Finalmente y tras el postre me invitó a ver su «muro de la fama», pared donde se encuentran las fotos de sus ilustres clientes. Le sugerí fotografiarnos juntos, accedió.

Al despedirnos, me comentó sonriente: «Vuelve a Jamaica y a mi restaurante y quizás te lleves una sorpresa». Eva Myers, genio y figura.