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Dando de comer a un rinoAyer miércoles, 15 de junio, tuvimos el privilegio y el placer de asistir en la sala de exposiciones de Viajes Azul Marino de Madrid a la charla audiovisual, Viajes y Animales de Fernando González Sitges.

Pillar a Fernando en España no es fácil, o está realizando algún documental de naturaleza por algún recóndito lugar del planeta o está por ahí, recibiendo algún premio de los muchos que atesora en su palmarés.

Fernando cautiva con sus conocimientos y también por su humildad, tiene un profundo sentido del humor y no presume de nada y eso le hace todavía más grande. En un mundo donde las fachadas son cada vez más importantes, él se muestra sencillo pero a la vez apasionado, se siente un privilegiado por poder vivir el tipo de vida que hace años decidió hacer.  Cuenta sus viajes, repletos de anécdotas, de una forma sencilla y amena pero a la vez con profundidad e intentado trasmitir una conciencia de cuidado de nuestro planeta para que las futuras generaciones también lo puedan disfrutar.

En su charla nos habló de pequeños trucos y consejos para poder fotografiar a los animales salvajes, de cómo disfrutar y valorar también los animales pequeños, de lo importante que es escoger bien la época del año para no llevarse desilusiones, de no crearse falsas expectativas con la naturaleza, de un detalle muy importante, los  compañeros de viaje, de los equipos fotográficos y también dijo, que al final la mejor foto de un viaje es la que nos traemos en la mente y en el recuerdo. Importante afirmación cuando lo dice alguien como él, que tiene miles y miles de fotos y horas de filmación.

Disfruta mucho, y también lo mencionó, con sus cuadernos de viaje,  maravillosos por cierto, y que los hace desde que de niño su madre le dijo: “Tu escribe y cuenta todo lo que veas “. Gracias señora por el consejo.

Conozco a Fernando desde hace muchos años y he tenido el privilegio de viajar con él. Compartimos algunos recuerdos y muchos sueños y quizás, nunca se sabe lo que nos depara el futuro, podamos viajar de nuevo juntos en busca de algún narval o porque no, del leopardo de las nieves. Si lo conseguimos brindaremos con un buen vermouth en alguna vieja taberna, te lo prometo.

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