Rate this post

Frente al hostal hay este precioso grafiti

Valparaíso está situado a 115 kilómetros de Santiago y por lo tanto, se puede ir de excursión por un día y regresar de nuevo a la capital chilena, pero si la ciudad porteña es entretenida a plena luz del día también lo es y mucho por la noche. Recomiendo disfrutar de los dos ambientes y por tanto no queda otra que dormir en Valparaíso.

La ciudad está rodeada de cerros, más de 40, y en uno de ellos, en Cerro Alegre, quizás el más bohemio y cuyas calles están repletas de grafitis, de pequeñas y curiosas tiendas, de salas de exposiciones, de amenos y entretenidos cafés y restaurantes, se encuentra el Hostal Cerro Alegre. En esta antigua casa remodelada y reconvertida en alojamiento donde cada habitación es diferente y situada en la calle Urriola 562, me he quedado yo en mi último viaje. Además de su excelente ubicación, sus buenos precios y su amable servicio hay otro motivo muy importante para pernoctar en este hostal. El lugar casi se ha convertido en un museo de pintura. En cada rincón hay colgados cuadros originales de incipientes artistas chilenos, incluso en algún parte del hostal toda la pared se ha convertido en un precioso mural. Los muebles son viejos y han sido rejuvenecidos y convertidos en obras de arte, las cortinas de las duchas son unos tremendos mapamundis, un bonito detalle que los buenos viajeros apreciaran sin duda. Quizás tu próximo viaje surja dándote una ducha en el Hostal Cerro Alegre, nunca se sabe.

Es lo que tiene Valparaíso, que siempre guarda alguna sorpresa para los viajeros.

Deja un comentario