Encantos de Eslovenia

Eslovenia, uno de los países más verdes del mundo.

Eslovenia, un país que nos cuesta situar en un mapa con precisión.  Un país del que apenas conocemos detalles. Que tan solo relacionamos con las clases de historia del instituto, en las que nos hablaban de su pasado bélico y de su ir y venir de fronteras, incluso algunos se seguirán refiriendo a este increíble país como Yugoslavia. Sin embargo, hace mucho de todo eso. Y aunque no estamos acostumbrados a ver este país en los medios de comunicación, tiene mucho que ofrecernos

¿Porque Eslovenia?

Incluso los más viajados, quedan atrapados ante la belleza pura de esta tierra. Cimas nevadas, vertiginosas vistas, ríos esmeralda, lagos cristalinos, cascadas, aguas termales, costas venecianas… son lo que hacen de este país un auténtico Edén.

Es el primer país declarado destino verde del mundo y en la cima de sus montañas te sientes el rey del mundo. Situado en el corazón de Europa y rodeado por los Alpes Julianos, el mar adriático, el Carso y el Plano de Panonia, Eslovenia se convierte en un pequeño tesoro para los enamorados de la naturaleza, la comida y la arquitectura.

La capital

La capital de este magnífico país es Liubliana. Rodeada de bosques, altas montañas, las  perpetuas nieves de los Alpes, y con el río Ljubljanica atravesándola, la capital no pierde la identidad natural del país. Pero sería injusto decir que los únicos atractivos de este país son naturales y su capital también da fe de ello.

La ciudad, se asienta a los pies de su magnífico castillo medieval y su centro neurálgico es su parte antigua. Su centro histórico, se mantiene prácticamente intacto a pesar de los terremotos y el pasado bélico de la ciudad. Esto hace que la ciudad tenga un carácter único.

Paseando por sus calles, encontramos una arquitectura armónica y variada. Algunos incluso describen Liubliana como una pequeña Viena aunque por su empedrado también podremos admirar palacios con aires del barroco italiano o perdernos por el barrio de Metelkova, uno de los barrios mas underground y multiculturales del país. Además de esto, la zona del río está adornada con hermosos puentes y el centro de la ciudad está cerrado al tráfico y lleno de amplias zonas peatonales y bicicletas que dan ambiente a la ciudad. Por último cabe destacar que la ciudad fue en 2016 Capital Verde Europea.

Actividades en la naturaleza

En cuanto a naturaleza este país lo tiene todo. Desde las imponentes cumbres del parque nacional del Triglav hasta playas en el adriático, pasando por las mágicas cuevas de Postojna y Škocjan, la preciosa cascada Savica o por el hermoso río turquesa del valle de Soca, donde se rodó parte de las crónicas de Narnia. Tener todos estos recursos naturales lo convierte en el lugar perfecto para esquiar, hacer trekking, senderismo, rafting, equitación, espeleología, barranquismo o deportes acuáticos. Y si todo esto no os gusta, siempre os podréis ir a tomar el sol a las preciosas playas de piran, una ciudad con encanto veneciano y aguas cristalinas.

Por último si queréis relajaros os recomendamos los balnearios y aguas termales de la zona de Bled. Si vais con niños,  la mayoría de estos balnearios están cercanos a aquaparks, llenos de toboganes y actividades infantiles, sino, también para los más pequeños os aconsejamos el tobogán de verano, 1500m de raíles que bajan por las laderas de Kranjska Gora.

Pueblos con encanto y tesoros culturales

Si hubiese estrellas Michelin para pueblos con encanto Eslovenia seria el país mas galardonado de Europa. Cada pueblo de este maravilloso país tiene algo que lo hace especial. El más famoso es Bled, un pueblo sacado de una postal. Esta localidad, está situada a las orillas de un precioso lago rodeado de montañas y con una pequeña isla en el centro. Además el pueblo cuenta con un castillo medieval en lo alto de un acantilado. Para admirar todo esto, os recomendamos un paseo en barca por el lago.

Sin embargo, aunque Bled sea la joya de la corona, hay otros pueblos con encanto en Eslovenia. Para muestra de ello, el encantador pueblo alpino de Kranjska Gora, la puerta a las estaciones de esquí más famosas del país o  Piran, una de las ciudades costeras más bonitas del mediterráneo.

En cuanto a tesoros culturales cabe destacar el Castillo de Predjama, un castillo blanco pegado a una cueva, el  monasterio franciscano en Nova Gorica, Iglesias en Hrastovlje, el Castillo de Miramare y la iglesia de Bled situada en la pequeña isla en medio del lago.

Gastronomía

Una de las mejores formas de conocer un país es a través de su gastronomía. Y Eslovenia no es la excepción. De hecho su comida es todo un lujo. Mezcla de manera exquisita los sabores mediterráneos con los austriacos y los húngaros y reinventa los clásicos como la sopa, el cerdo, cordero y ave  dando a luz a combinaciones insólitas como las bolas de pasta con patata o caza o la increíble Kremma Rezina, una tarta de vainilla con crema pastelera y hojaldre recubierto de azúcar glas o chocolate. Y es que, la cocina eslovena es muy sofisticada, siendo muy rigurosos con la utilización de ingredientes frescos y locales. Un país de ensueño para los foodies.

Además el vino esloveno, sobre todo el de la región de Goriska Brda  tiene una gran calidad. Si viajas a este país tampoco podéis dejar de catar el aguardiente Slivovica, o la cerveza negra Temno Lasko. Por último, al visitar este país guiaros por los manjares con denominación de origen, como los quesos o la miel silvestre y por la indicación de especialidad tradicional garantizada. Una gastronomía tradicional y de calidad que os enamorará.

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